Tikkun Olam

La humanidad ha fracasado en sus intentos de formar la primera generación correctamente educada que asegure un futuro mejor a generaciones próximas. El desarrollo de la humanidad está detenido por falta de educación basada en la interconexión humana, la responsabilidad mutua y el respeto al medio ambiente.

Vivimos en una secuencia de errores repetitivos, porque no hemos aprendido a vivir conforme a las leyes de interconexión y otorgamiento presentes en la naturaleza de la que formamos parte. Vamos en la vida en un mismo barco que se llama planeta Tierra. Si seguimos haciendo agujeros al barco nos hundiremos y terminaremos ahogados. No tenemos otro barco. Una educación correcta a los niños, basada en la interconexión e interdependencia humana, la responsabilidad mutua y el respeto al medio ambiente, es necesaria para asegurar un futuro mejor a generaciones próximas. Esto es verdad, porque cada generación que reciba el método correcto de educación, sería capaz de formar adecuadamente a la generación próxima. De lo contrario, cada generación siguiente sería inferior en comparación con la generación anterior. Educación significa saber convivir. Saber, requiere además de conocimiento, una justificación fundamentada en la convivencia humana.

Grupos amplios de población en la sociedad tendrían que convencerse que los humanos somos esencialmente egoístas, egocéntricos, depredadores y, al contrario del resto de los seres en la naturaleza, no fuimos dotados con un programa de comportamiento idóneo instintivo obligatorio. Fuimos dotados con libertad para elegir el tipo de educación que transmitiremos a la próxima generación.

Estamos obligados a conocer nuestra naturaleza egocéntrica que evita la reparación del mundo y el bienestar de generaciones próximas. La corrección de nuestro comportamiento, basada en la responsabilidad mutua, el otorgamiento y el respecto al medio ambiente, sería ejemplo para nuestra descendencia.

Estamos interconectados y somos interdependientes. Buscamos certezas en nuestras dudas cuando lo conveniente para corregirnos sería encontrar dudas en nuestras certezas. La frase "Tikkun Olam" en hebreo, significa "reparar el mundo". Se utiliza en el judaísmo para explicar el concepto de justicia social, responsabilidad mutua y respeto al medio ambiente. "Tikkun Olam" es una filosofía de vida; una contribución al mundo; un ejemplo a seguir para lograr cambiar la mentalidad cruel, egoísta e indiferente que se muestra en las sociedades.

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Jorge Alejandro DelaVega L.
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