Jorge Alejandro DelaVega Lozano

Educados en el teléfono celular y la televisión, incluso antes de saber leer y escribir, los "vídeo-niños", se convierten en adultos insensibles al conocimiento transmitido por la lectura, y se limitan a reaccionar frente a imágenes. La cultura del libro, sigue siendo de unos pocos. La palabra, es símbolo que se resuelve en lo que significa, en lo que nos hace entender. Entendemos la palabra si conocemos el lenguaje al que pertenece. Por el contrario, la imagen es independiente del lenguaje. Podemos mostrar la palabra inteligencia con la imagen de un cerebro, pero esta imagen es distorsión del concepto inteligencia; la imagen de un hombre sin empleo, no revela la causa del desempleo, ni las formas para resolverlo; la imagen de un reo que abandona la cárcel, no explica la libertad; la imagen de un pobre, no explica la pobreza, ni la imagen de un enfermo nos hace entender la enfermedad. Los “video-niños”, formados en la imagen, se convierten en adultos reblandecidos por l

La Verdad Desnuda En una leyenda del siglo XIX, la Verdad y la Mentira se encontraron de frente. La Mentira le dijo a la Verdad: "Hoy es un día maravilloso". La Verdad miró el cielo y a su alrededor y se dió cuenta que el día era maravilloso en realidad. La Verdad y la Mentira pasaron tiempo juntas y llegaron a un lugar donde había una fuente. La Mentira en la fuente le dijo a la Verdad: "¡El agua en esta fuente está muy buena, bañémonos juntas!" La Verdad y la Mentira se desnudaron y comenzaron a bañarse. La Mentira salió súbitamente del agua en la fuente, se puso la ropa de la Verdad y huyó. La Verdad salió furiosa de la fuente y anduvo de prisa tratando de encontrar por todos lados a la Mentira para recuperar su ropa. La humanidad, al ver a la Verdad desnuda, desviaba la mirada con gesto de desprecio. La Verdad triste y avergonzada frente a la humanidad, regresó a la fuente y se ocultó allí para siempre. Desde entonces, la Mentira se presenta vestida co